La conjunción de dos gamberros: Júpiter y Saturno
Cuando los planetas siguen su rumbo y la humanidad sigue su vida
El año 2020 dejará una marca indeleble en nuestra existencia. Formaremos parte de una civilización que logró vivir cambios, pero CAMBIOS de verdad. Cambios, experimentados, comprobados y cuestionados, por cada uno de nosotros, en cualquier punto de la Tierra.
Un año aleccionador, que rompió los paradigmas de creencias establecidas
Manifestaciones climáticas y geológicas importantes
Movimientos telúricos drásticos, volcanes dormidos que despertaron, incendios descomunales, inundaciones sin precedentes, nevadas fuera de tiempos…
Movimientos políticos e ideológicos descabellados
Republicanos, demócratas, socialistas, comunistas, tecnócratas, oligarcas, clase obrera, racistas, milicias, carreras armamentistas, hackers, extraterrestres, influencers e influyentes… Por nombrar algunos.
Manifestaciones de salud pública sin resolver
Que si es gripe, que si es alergia, que si es pulmonar, que si viene de los animales, que si lo implantaron, que sí cayó del cielo o vino del infierno. Que si hay que lavarse las manos, que si tapate la boca, que si es una estafa, que si nos manipulan, que si la vacuna, que si el cloro, que móntate en el avión, que bájate del avión, mantén las distancia, no abraces, no beses.
Los doctores, los enfermeros y los servicios públicos de emergencia: Héroes incuestionables
Han hecho lo imposible exponiendo sus vidas y tratando de resolver las incógnitas de una epidemia, a la cual todavía no se le ha hallado una solución.
En fin, como leerán en el 2020 nadie se ha puesto de acuerdo. Ni lo van a hacer por un buen tiempo, ya que estos procesos, que estamos viviendo, están asociados a un cambio imperativo para el mundo.
Siempre he sostenido que para que un cambio se manifieste de manera positiva, debe ser conceptual y poéticamente profundo. Y, debe darse, de una manera lenta. De lo contrario, no será un cambio, será un momento.
Afortunadamente, tenemos en estos tiempos, el Planeta Urano en el signo de Tauro. El cual, se mantendrá ahí, hasta el 08 de Julio del 2025.
Y también, al Planeta Plutón, en el signo de Capricornio. El cual se mantendrá ahí hasta el 20 de Noviembre del 2024.
Haciéndonos pisar tierra, nos guste o no.
Astrológicamente: Lo que está sucediendo y estamos viviendo en nuestro mundo HOY, es lo que debe ser. Así de simple!
Admitirlo es cruel. Pero más cruel es, no dar soluciones. Cruel es, no aprender que los indicadores astrológicos nos han advertido por milenios: Lo que vamos a vivir. Y ojo, no se trata de indicar, que la humanidad, se convierta a una religión astrológica… Que, de paso, ya he observado unos síntomas un poco raros, por ahí…
Se trata de que: Ya es tiempo de APRENDER a utilizar la información, para mejorar nuestra raza humana. Es hora de entender y aprender, sobre nuestras oportunidades.
Es tiempo de prepararse y fortalecer, los puntos débiles que irremediablemente, vamos a experimentar. Es tiempo de formar alianzas, para construir.
Es tiempo de poner a un lado la individualidad, el egoísmo, el patriarcado (mal entendido) y el matriarcado (que aunque tenga razón, también desea sublevarse), e implantar el orden.
Somos UNO con el TODO! No me cansaré de repetirlo y escribirlo. ¡Ese enunciado es absolutamente cierto!!! Pues el TODO, nos provee de lo esencial para vivir: Aire, luz, agua y tierra. (Y, es gratis…)
Lo que sí debemos aprender a integrar, como seres pensantes, es la realidad humana que vivimos: Pertenecemos a un COLECTIVO, siendo seres individuales. Ese es el secreto que debemos develar aquí, en el universo material.
Nacemos con características físicas individuales, con proyecciones mentales individuales, con capacidades únicas. A través del desarrollo personal aprendemos, a percibir, que vinimos a este mundo con un rol específico. Un rol que debemos cumplir y proyectar, haciendo lo correcto. Esto es para TODOS.
La era de Acuario representa, astrológicamente, la era del hombre, de la humanidad
Se afirma en muchos textos, que estamos en la era de Acuario. ¿Desde hace cuánto tiempo? Difícil de asegurar el tiempo exacto.
Lo que, sí es cierto y anunciado por la bóveda celeste, es que este año 2020 representa el cierre de un tiempo que dejará una gran huella en nuestra historia, para las generaciones por venir. Una década que se cierra, para dar paso a una nueva vida.
En este año 2020, el cielo nos regaló el aprendizaje de un Stellium en Capricornio Este, ya no lo volverá a vivir, los de esta generación.
Algunos opinan que esa energía nos hizo daño pues, nos arrinconó. Pero, extrañamente, lejos de arrinconarse, esa energía les favoreció a muchos en la toma de decisiones que, aún más sorprendentemente, los condujo a asumir las riendas de sus vidas y emprender nuevos propósitos.
Este cierre de año 2020 promete, pues Júpiter y Saturno se desplazarán al signo de Acuario… ¿Eso que significa aparte de una conjunción?
Significa que Urano el planeta regente del signo de Acuario, se sentirá muy incómodo con estos dos gamberros en su casa natal, ya que percibirá a Júpiter, tratando de divertirse a lo lindo en su territorio y a Saturno, lo percibirá diciendo: ¿Me estaban esperando?
La cuadratura de este par, con Urano: Dará mucho que hablar a los astrólogos, en el 2021…
Recordemos que Saturno es el orden, lo correcto. Estando en el signo de Acuario, actuará como un puente conectando los valores sociales establecidos con los modos avanzados de pensamiento. Si aprovechamos la oportunidad, de una forma adecuada, este emplazamiento de Saturno en el signo de Acuario, nos dará resultados positivos.
Solo hay que tener claras las diferencias que se puedan manifestar. Ya que las reformas de corazón, con este constructor tan severo y entregado, deberían generar, como resultado, un comportamiento positivo, en esta nueva sociedad…
En cuanto a Júpiter en Acuario, llegará ejerciendo la autoridad de forma amistosa, libre e independiente. Haciendo sentir a todos, la ventaja de aumentar el conocimiento, la evolución y el desarrollo de la humanidad. Solo hay que tener cuidado, de que esta energía no se escape de posibilidades, que generen nuevas y REALES oportunidades, ya que este emplazamiento, puede activar excesivamente el desapego concerniente al proceso acuariano, originando desorden, excesiva generosidad y momentos muy imprevisibles.
Desde mi ventana, y para finalizar, quiero comunicarles que este cierre del 2020 nos regala una oportunidad, consciente, de poder observar como Júpiter y Saturno danzando juntos (la música del Katun) abrirán la cuarta y última puerta astrológica del año. Observemos como le dan la bienvenida, al gélido solsticio de invierno, el 21 de Diciembre y seamos testigos, de los nuevos tiempos.
Luego de la nota final: Ellos seguirán su rumbo, y la humanidad seguirá su vida.
Este es el legado de los planetas, que reinan en el Universo.
Todos ellos concebidos, por un soplo de la divinidad.